Descripción
El té verde Kukicha es un té de origen japonés, que se prepara a partir de las ramitas y tallos de la planta del té, en vez de usar las hojas como es lo habitual. Kukicha significa “té de ramita”.
Las ramitas y los tallos siguen el mismo proceso que se utilizaría con las hojas de un té verde: se impide su oxidación con vapor, se secan y se tratan. El sabor del té de Kukicha es cremoso y con toques a nuez, sin perder la herbalidad del té verde.
Para la elaboración de té Kukicha se utilizan las plantas cuyas hojas sirven para elaborar el té Matcha, que es uno de los tés más cuidados y saludables de todas las variedades de té. De hecho, se piensa que los primeros consumidores de té Kukicha fueron los propios recolectores, que empezaron a utilizar los descartes (ramitas y tallos) del té Matcha para sus propias infusiones.
Un vaso de té Kukicha contiene seis veces más calcio que un vaso de leche de vaca, por lo que previene enfermedades como osteoporosis, artrosis y reúma; es muy rico en minerales (Zinc, Selenio, Manganeso y Flúor); aporta más del doble de vitamina C que la naranja y también tiene vitamina A y B, lo que unido a su aporte de sustancias antioxidantes ayuda al sistema inmunológico contra patógenos dañinos de distinto tipo, tanto radicales libres como de tipo vírico; es un té bajo en teína y cafeína, por lo que no impide conciliar el sueño como otras variedades de té y se puede consumir por la noche; es diurético, especialmente recomendado para personas propensas a tener retención de líquidos; ayuda a regular y reducir los niveles de azúcar en sangre, eliminar toxinas y proteger las mucosas.
Pero el beneficio más característico del té Kukicha frente a otras variedades de té verde es su capacidad alcalinizante, que consigue neutralizar la acidez de los alimentos de nuestro estómago si se toma después de las comidas. Con ello se suaviza la digestión y nuestro cuerpo absorbe mejor los nutrientes.
Para preparar el té Kukicha se utiliza una cucharadas de té por taza y el agua a unos 80ºC. Se deja reposar un minuto y medio, o como mucho dos minutos.